2010/03/31

LAS PLACAS LAS CARGA EL DIABLO

La placa Nazca lleva chocando con la Sudamericana durante miles de años y este violento encuentro, además de originar terremotos y volcanes, es el responsable del levantamiento de la cordillera de los Andes.
En Mendoza sentimos un par de réplicas de unos 3 grados en la famosa escala y como las placas las carga el Diablo y los caminos del Señor, además de inescrutables, son muy variados decidimos alejarnos, por el momento, de la Cordillera e ir a la Costa atlántica, a Península Valdés.

Martxoak 6

2010/03/30

MENDOZA, TIERRA DE VINOS

Cuando llamábamos desde Chile para reservar alojamiento en Mendoza, la respuesta era siempre la misma: tenemos todo completo. Empezamos a pensar que el terremoto había desviado el turismo de Chile a la ciudad mendocina. Pero no, la razón era otra: celebraban la Fiesta de la Vendimia. Lógico: Marzo, finales del verano austral.
Mendoza está enclavada en una zona con clima semidesértico, con veranos cálidos y de poca precipitación. Los excelentes parques que adornan la ciudad y la rica zona agrícola de sus alrededores son obra del hombre que ha sabido aprovechar los ríos que bajan de las cumbres andinas. Muchas de las calles de la ciudad tienen, entre la calzada y las aceras, acequias que sirven para regar los árboles de los parques y calles.
Éste, su verdor en pleno desierto, es el mayor atractivo de la ciudad... junto a los efluvios vitivinícolas que llegan de las pequeñas ciudades-satélite -departamentos- de sus alrededores (el 60% de la producción argentina).
Nosotros elegimos el departamento de Maipú (a unos 15 km del centro) para degustar los vinos de la zona.

En cuanto a la Fiesta de la Vendimia, que algunos mendocinos nos la equiparaban a los Carnavales de Río, nada: desfiles de ambiente provinciano y elección de la Reina de la Vendimia entre las diferentes candidatas departamentales.

Martxoak 4/5

2010/03/29

"DICEN QUE IQUIQUE ES GRANDE COMO UN SALAR"

En el N no hemos visitado Iquique, otro de los lugares de nuestra geografía mítica desde que Quilapayún interpretara la épica Cantata de Santa María de Iquique. Los 500 km desde San Pedro de Atacama (sólo ida) nos han desanimado. Sin embargo, cuando desde Santiago cruzamos en autobús los Andes en dirección a Mendoza atravesando cerros majestuosos, tenemos como compañero de viaje a Fernando Echeverría Sánchez, un minero de Iquique.
Fernando es de baja estatura, fuerte complexión y con un agradable rostro mestizo que le hace no aparentar los 52 años que tiene. Se siente a gusto hablando con nosotros y nota que el sentimiento es mutuo. Hablamos y hablamos durante las seis horas de viaje.
El gerente de la mina le ha concedido un permiso de 48 horas para visitar a la familia y comprobar que ni ella ni su casa han sufrido daños con las réplicas del terremoto. Después de un viaje de 2300 km. llegará esta noche a Mendoza y saldrá de nuevo hacia el trabajo mañana por la tarde.
Nos cuenta que nació en Chile en una familia campesina. Parte de su familia (y él entre ellos) huyó de Chile cuando el golpe de Pinochet y se instaló en la argentina Mendoza. Tres años más tarde tuvo lugar el golpe militar encabezado por el general Videla "menos violento que el chileno".
Él siempre ha pensado que los trabajadores tienen que exigir sus derechos y no entiende que por ello le llamen comunista. Tampoco entiende porque sus compañeros chilenos le llaman, con ánimo hiriente, el argentino cuando él nació y trabaja en Chile. Le gustan más los argentinos que los chilenos porque éstos "están más mezclados". "Como yo, por ejemplo, que tengo sangre española que me viene del apellido Sánchez e india, del apellido Echeverría". No le hacemos ver lo curioso que nos resulta su afirmación.
Nos cuenta que trabaja 9 horas diarias durante 20 días seguidos y descansa 10 días, que en Chile se cobra tres veces más que en Argentina, que trabajan a más de 3000 m de altura en una mina de cobre, que vive en un barracón con otros tres compañeros, que come y pasa el tiempo de ocio en la cantina de la empresa, que tienen totalmente prohibido el alcohol, que a los que trabajan a más de 4000 m les suben y les bajan todos los días desde ña mina, que su sueño desde la infancia es el de ir a Australia, que un cuñado suyo ha quedado en paro en Barcelona y no sabe que va a hacer porque tiene que pagar la hipoteca del piso, que él nunca hubiera comprado un piso allí, que tiene una hija de 30 años con algún tipo de problema, que no quiere que se case porque su marido haría con ella lo que quisiera, que es asmático... Lleva sin comer desde ayer y guarda el sandwich que nos han dado en el autobús, quizás para llevarselo a su mujer o a su hija.
El cansancio y el hambre no le impiden actuar como guía turístico para nosotros: aquel cerro es el Aconcagua, a eso le llaman el puente del Inca, hay un sitio para comer en Mendoza...
Es una persona noble y afectuosa, como tanta otra gente que estamos encontrando en nuestro viaje.
Cuando nos despedimos y le pregunto si tiene acceso a Internet, sonríe.

Martxoak 3

¿ABIERTAS LAS GRANDES ALAMEDAS DE SANTIAGO DE CHILE?

Una de las mayores satisfacciones de un viaje es poder encontrar alguno de los lugares de tu propia geografía mítica.

La mitología personal de uno es de lo más impredecible. Para algunos el viaje de su vida es aquel que les permite visitar y pisar la misma tierra que tiempo atrás pisaron sus improbables profetas y dioses. Otros recorren con devoción las calles y estancias que otrora vieran sus escritores o pintores favoritos. Están también los que, subyugados por la propaganda mediática –una forma como otra cualquiera de generar mitos-, visitan con entusiasmo lugares como Marbella o la Costa Azul.

En los años 70, en una España todavía bajo la dictadura franquista, se forjó uno de esos mitos basados en las informaciones que llegaban de un alargado país llamado Chile. El socialismo democrático era posible... Luego pasó lo que todos sabemos.

Siendo Santiago uno de los lugares de la geografía mítica de nuestra juventud, ¿cómo podíamos estar en Chile sin pasar por este escenario?

No caímos en el morbo de visitar el barrio viejo arrasado por el terremoto de hacía 4 días y paseamos por los alrededores del Palacio de la Moneda y por las Alamedas.


En la mente teníamos aquellas otras imágenes del 11 de Septiembre de 1973.



Aquel 11 de Septiembre, poco antes de morir, Salvador Allende pronunció su último discurso que terminaba con estas conocidas palabras:

"Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.
¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores!
"

¿Están ya abiertas las grandes alamedas?

Martxoak 3

DESIERTO DE ATACAMA

Con un día de retraso podemos coger el autobús a Santiago de Chile, vía Calama y Antofagasta.

Recorremos un paisaje sin rastro vegetal, sobrecogedor en su desolación, y llegamos al caserío de Antofagasta, acurrucado en una ladera frente al Pacífico. Se presenta como el único refugio, áspero y desapacible, del hombre en este desierto.

Viajamos centenares de kilómetros hacia el Sur sin encontrar un árbol, un matorral, una brizna de hierba...


Hasta que el sol deja paso a una inconfundible Cruz del Sur hacia la que nos dirigimos...

Martxoak 2

¡TIEMBLA!

Hoy (27 de Febrero) en el desayuno hemos oído en la TV la noticia de un terremoto en el centro de Chile. 8,8 en la escala de Richter. Hablan de 27 muertos. Una pareja de Antofagasta nos dice que han sentido el temblor aquí , en San Pedro, cuando se levantaban para una excursión. "Tembló a la mañana" dicen como nosotros hubiéramos dicho llovió ayer o nevó por la noche. Son cosas normales de la Naturaleza.
Cuando se empieza a conocer el número de muertos, intentamos animar a los chilenos:
"Ha sido 50 veces más fuerte que el de Haití y las víctimas son muchas menos"
"Éste es un país tercermunista. No crean los datos del gobierno. El desastre será mucho mayor"
Sale esa vena excéptica y pesimista del chileno que también habíamos detectado anteriormente en el argentino.
Desgraciadamente el número de víctimas irá subiendo a lo largo del día.

Otsailak 27

2010/03/28

ALREDEDORES DE SAN PEDRO DE ATACAMA (II)



Ojos de Tebinquiche

Cordillera de la Sal. Valle de la Muerte
Valle de la Luna




Otsailak 26/27/28 eta Martxoak 1

2010/03/27

ALREDEDORES DE SAN PEDRO DE ATACAMA (I)

Gran Salar de Atacama. Laguna Chaxa

Laguna Miscanti

Laguna Miscanti

Laguna Meñiques

Salar de Aguas Calientes






Fumarolas y géiseres de El Tatio






Vicuña

Volviendo a San Pedro
Otsailak 26/27/28 eta Martxoak 1

INDIOS ATACAMEÑOS

El atacameño sufrió primero el ímpetu del Inca y luego sucumbió ante el español. Una historia repetida.
Su lengua, el kunza, se mantiene en unas pocas palabras que utilizan ocasionalmente y en los topónimos. Las atacameñas que regentan los parques naturales de la zona nos dicen que sus abuelos hablaban kunza pero que ellas sólo conocen algunas palabras: saira, lluvia; lickan, pueblo; cabur, montaña; solor, flamenco...
A un cuarto de hora andando desde San Pedro están las ruinas de la ciudad preincaica de Quitor. Situada en una colina, dominando el valle fluvial del Río Grande, cedió ante el ataque de Pedro de Valdivia y sus aliados indios.

Ruinas de Quitor y oasis de San Pedro de Atacama

Es evidente que en estas desoladas tierras los pocos españoles que aquí llegaban no hubieran podido someter a estos pueblos sin la ayuda de otros indígenas (“ciento cincuenta y tres hombres y dos clérigos, los ciento y cinco de a caballo y cuarenta y ocho de a pie, más el millar de indios de servicio, cuyo lento andar por la carga del bagaje determinaba el ritmo del avance al entrar al vasto y temible Despoblado de Atacama, ardiente de día y gélido en la noche...")

Más al N, los aymaras, a pesar de haber sufrido más la presión del quechua incaico, mantienen su lengua.

Otsailak 26

2010/03/22

CRUZANDO LOS ANDES

Atravesamos los Andes por el paso de Jama (4700 m). La respiración se vuelve dificultosa mientras la vista se expande hacia las inmensas llanuras salpicadas de salares a 4000 m de altura, la inhabitable puna.
Llegamos a San Pedro de Atacama (Chile) y la primera impresión, no podemos desprendernos de nuestros clichés culturales, es la de un poblado mexicano que tantas veces nos han mostrado las películas norteamericanas. Calles polvorientas y casas de adobe de una altura. Allí multitud de establecimientos ofertan excursiones, alojamiento o servicios hosteleros junto a otros más tradicionales como las amasanderías (tiendas de alimentación) o las botilerías.
El entorno de San Pedro es espectacular. La Cordillera con alturas cercanas a los 6000 m. corta nuestra visual hacia el N y el E con siluetas de volcanes, alguno de ellos activos. Hacia el S y el O se extiende el desierto de Atacama.
Es tierra dura, desértica, sin vegetación. Sin embargo San Pedro es un oasis que aprovecha el deshielo de la nieve de las altas cumbres.
Otsailak 25

2010/03/16

LOS INCAS LLEGARON HASTA SALTA Y JUJUY

En Salta es visible el rastro indígena en las caras de sus habitantes. Podría pensarse en el componente boliviano (Bolivia está a pocos kilómetros) de su población. Aunque ese pudiera ser un factor, no es el principal ya que el norte de Argentina mantiene una población indígena autóctona.
Subimos por la carretera que pasa por Jujuy, deja a un lado el arco iris de las rocas de Purmamarca y atraviesa la quebrada de Humahuaca. Purmamarca
Después de cruzar el Trópico de Capricornio, llegamos al pequeño pueblo de Humahuaca a 3000 m. de altura. Oimos a niños y mujeres de tez oscura hablar quéchua, la otra gran lengua indígena (junto al guaraní) con posibilidades de sobrevivir.

Los incas en su tardía expansión hacia el Sur llevaron e impusieron su lengua, el quéchua, a los pueblos del norte de las actuales Chile y Argentina.
Sin embargo, comunidades indígenas preincaicas mantienen su personalidad a pesar de haber perdido su lengua. Humahuaca
En la pintoresca Tilcara indios venden sus artesanías en la plaza del pueblo y nos hablan de comunidades wichis,tobas y mocovíes, indígenas del profundo Chaco.
Uno de ellos nos entegra unas hojas con información de su comunidad en un depurado euskera. Técnica comercial de aproximación al posible clienten en plena puna, pero ¿quién es el autor de la traducción? Puede haber sido un viajero ocasional que en esta época de comunicación global haya enviado la versión en euskera desde Euskal herrria o, tal vez, alguno de los múchos bohemios o trotamundos que, huyendo de la uniformización que nuestras urbes nos imponen se han asentado en estos valles de liviano aire.

Leemos: "Pacha (quechueran) lurra denak. gure hizkuntzan denbora-espazio esan nahi du. Horrekin ohar gaitezke zenbateko aurretiatasunez gure antzinako biztanleek espazio eta denbora gauza bera denaren jakitea bazutela..."

Y luego se habla de la originalidad de Einstein.